Crianza

La importancia de tener huerta en casa

En el último tiempo, nos hemos encontrado mucho más en nuestras casas y poco a poco hemos comenzado a tomarle más valor a la naturaleza y todo lo que viene relacionado a ella. Es por esto que hoy queremos hablarles de los beneficios que tiene cultivar nuestros propios alimentos, tanto a nivel personal, familiar, social y medioambiental.

Nuestros niños cada día, debido a la sociedad, el ritmo acelerado en el que estamos viviendo, crecen más desconectados de lo natural y pierden conocimiento de grandes procesos que ocurren para que puedan alimentarse. También está en la naturaleza de ellos, la inmediatez. “Mamá tengo hambre y se acabó la comida, ¿podemos ir al supermercado rápido a comprar?” O peor aún “¿Mamá, puedes pedirlo rápido por la app del celular para que llegue en menos de 90 min?” Además, en este mundo tan “desechable”, poco conocen de reutilizar y reciclar que es fundamental para la sustentabilidad de nuestro planeta.

Una muy buena manera de inculcar e ir enseñando estos procesos, es mantenerlos cerca de la tierra, enseñarles lo que la naturaleza es capaz de entregarnos y que finalmente aprendan a cultivar sus propios alimentos en una huerta en casa. Como bien R3 (del libro R3 y la huerta mágica de Cuenta Cartón) nos habla de un proceso de constancia y perseverancia para hacer la propia huerta, también les enseñamos a nuestros niños estos dos valores tan importantes.

Cultivar nuestros propios alimentos en casa trae muchos beneficios. Ayuda a disminuir el dióxido de carbono de las ciudades, ya que es asimilado por los cultivos para realizar la fotosíntesis. Ayuda a desarrollar conciencia por el respeto a la naturaleza y el medio ambiente. Fomenta el autoconsumo y limita el derroche de alimentos, del agua y de la energía que se emplean en la producción a gran escala. Cultivando en casa puedes además acceder a alimentos de mejor calidad, fertilizados de manera segura y libres de pesticidas químicos sin tener que pagar el elevado precio de los “orgánicos” del supermercado. Por otra parte, está científicamente comprobado que estar en contacto directo con la tierra, hace que nuestro cerebro secrete serotonina, que es un neurotransmisor relacionado a la sensación de bienestar y felicidad.

Algunos consejos básicos para comenzar a cultivar: no necesitas de un gran espacio, puedes partir de a poco, ya sea en tu casa o departamento. No pienses que todo se te va a dar al tiro, el proceso requiere de constancia y paciencia, además de práctica. Debes ubicar un lugar que reciba al menos algunas horas de sol diario. Es necesario tener una buena tierra para plantar ya que el sustrato puede hacer una gran diferencia. Hay que informarse sobre el riego adecuado a las necesidades de cada cultivo y mantenerlo constante y de acuerdo al clima. Pero lo más importante: ¡hay que tener las ganas!

En @kongin_almacigos puedes encontrar todo lo que necesitas para comenzar esta aventura, desde los almácigos, los contenedores de huertas, hasta la tierra y los accesorios necesarios. Además, siempre están disponibles para guiar y asesorar en este maravilloso proceso.