Mucho se dice de los chupetes, a veces para bien, otras para mal. Pero hay algo que es innegable, hay situaciones que sólo ese aparato mágico puede salvar. No por nada vemos mamás metidas en los rincones más inaccesibles para poder encontrar ese preciado artículo que hará que tu bebé vuelva a encontrar la paz y la tranquilidad.
El uso del chupete es motivo de controversia tanto entre los padres como entre los profesionales de la salud. Muchos aseguran que son inofensivos e incluso beneficiosos y necesarios para el desarrollo del lactante; otros por el contrario, aseguran que su uso se ha relacionado con el acortamiento del tiempo de amamantamiento, el aumento de frecuencia de otitis media, problemas dentales y riesgo de accidentes.
Como en muchas cosas en relación a la maternidad, no existe una verdad absoluta. No se puede clasificar al chupete como bueno o como malo. Más bien depende del uso que le den los padres. Aquí te mostramos algunos puntos de vista y temas a considerar en cuanto al uso del chupete.
Beneficios
Disminución de la probabilidad de muerte súbita: Un estudio del Instituto Monash, de Sídney, Australia, concluyó que el chupete protege al bebé contra la muerte súbita, pues tendría un impacto en la presión sanguínea y el ritmo cardíaco.
El chupete tiene un efecto analgésico y relajante en el bebé, por eso calma el llanto, ayuda a conciliar el sueño, puede reducir el estrés y el dolor en procedimientos desagradables.
Algunos chupetes ortodónticos como los de NUK promueven el correcto desarrollo muscular, la respiración nasal y permite el desarrollo natural de la mandíbula del bebé.
Succionar en determinados momentos como cólicos u otras molestias, produce un efecto placentero en los niños, lo que podría ayudar a calmar dolores.
A considerar
Hay profesionales que consideran que el chupete puede interferir en el proceso de lactancia, por lo que recomiendan no ofrecer el chupete durante los primeros días para instaurar primero la correcta lactancia.
Llega un punto en que el chupete aumenta el riesgo de problemas dentales y de desarrollo del lenguaje. Por eso algunos pediatras aconsejan usar el chupete máximo hasta los dos años, aunque hay algunos que ponen el límite en el año de vida.
Chupete seguro
Hay ciertas características que el chupete debe tener para que sea seguro para el bebé:
Tanto el chupete como la cadena, deben tener bordes suaves y no pueden ser desmontables.
El escudo debe tener orificios para ventilación.
No untar el chupete en cosas dulces como la miel, pues favorece infecciones y caries
Cambiar el chupete regularmente antes de que se deteriore
