Una de las inquietudes que tenemos cuando nos quedamos embarazadas es desarrollar un embarazo ectópico o tubárico, y generalmente no sabemos exactamente qué es. En este artículo y junto con los síntomas, riesgos y tratamiento, te vamos a contar qué es un embarazo ectópico.
Un embarazo ectópico es un embarazo que se desarrolla fuera del útero. Puede ser grave para la madre e incluso puede provocar su muerte si no se trata a tiempo.
En la mayoría de los embarazos, el óvulo fecundado viaja a través de las trompas de falopio y se implanta y desarrolla dentro del útero. Si el movimiento de este óvulo a través de las trompas de falopio se bloquea o se retrasa, puede llevar a que se dé un embarazo ectópico.
En la mayoría de este tipo de embarazos, el óvulo se implanta en las trompas de falopio, pero en algunas ocasiones puede implantarse en los ovarios, el abdomen o el cuello uterino. Estas zonas no disponen de suficiente espacio ni del tejido nutricional de que dispone el útero para que se pueda desarrollar un embarazo.
Los embarazos ectópicos no pueden continuar con normalidad. El óvulo fecundado no puede sobrevivir, y el aumento de tejido puede provocar sangrado, que ponga en riesgo la vida de la mujer si no se trata.
Imagen: Reproducción Asistida ORG
Sintomas de un embarazo ectópico
Los primeros síntomas que aparecen para avisarnos de que podemos estar desarrollando un embarazo ectópico suelen ser el dolor y el sangrado vaginal. Puede haber dolor en la pelvis, el abdomen, en la zona lumbar o incluso en los hombros o el cuello.
Principales síntomas:
– Sangrado vaginal.
– Mareos o desmayos por la pérdida de sangre.
– Hipotensión, por la pérdida de sangre.
– Dolor en la zona de la pelvis (en un lado de ésta o en todo su conjunto), dolor lumbar o incluso en hombros y cuello.
Diagnostico y tratamiento de un embarazo ectópico
El diagnóstico se realizará a partir de los síntomas clínicos junto con exámenes de laboratorio, como la determinación de la hormona gonadotrofina coriónica (HCG) que es la que indica embarazo, y una ecografía ginecológica.
Con la ecografía ginecológica se comprobará la presencia del embarazo en la trompa del falopio e incluso evidencia de sangre en la cavidad pélvica.
En presencia de estos hallazgos, la confirmación y tratamiento del embarazo tubárico es a través de una laparoscopia que es una cirugía que utiliza incisiones pequeñas.
Si se diagnostica en etapa temprana, y por eso es importante estar atenta a los síntomas, se puede optar por un tratamiento con medicamento que detenga el crecimiento celular y con un control estricto en el que se mida periódicamente la hormona HCG y se realicen ecografías hasta comprobar que desaparece.
Factores de riesgo
– Un embarazo ectópico anterior.
– Inflamación o infección. Las infecciones de transmisión sexual, como la gonorrea o la clamidia.
– Tratamientos de fertilidad. Algunas investigaciones indican que las mujeres que se someten a fertilización in vitro o tratamientos de ovulación similares tienen más probabilidades de tener un embarazo ectópico.
– Cirugía de las trompas de falopio. La cirugía para corregir las trompas de Falopio cerradas aumenta el riesgo de un embarazo ectópico.
DIU y ligadura de trompas. Si quedas embarazada mientras tienes colocado un DIU (cosa poco probable) lo más seguro es que sea un embarazo ectópico. También aumenta el riesgo si te quedas embarazada después de que te hayan realizado la ligadura de trompas.
Cómo puedes reducir el riesgo
Limitar el número de parejas sexuales y utilizar un preservativo durante las relaciones sexuales ayuda a prevenir las infecciones de transmisión sexual como la gonorrea y reduce el riesgo de inflamación pélvica.
Deja de fumar antes de intentar quedar embarazada.