En cuanto a los tipos de parto actualmente existen diferentes alternativas para tener a tu guagua. A continuación, te enseñamos sobre cada tipo para que tengas una idea de qué se trata, llegues con conocimiento y sin miedo a ese momento tan especial que marcará tu vida.
Existen tres tipos de parto: natural, vaginal y cesárea. La mujer durante los controles prenatales debe plantear su proyecto de parto, el que debe ser conversado con su médico tratante. Cabe aclarar que no siempre dependerá de nosotros el tipo de parto.
El término del embarazo comienza alrededor de la semana 37 y termina en la semana 42, contando desde el primer día de la última menstruación. El trabajo de parto habitualmente comienza cuando la mamá está lista para tener a su guagua.
Es tendencia buscar un tipo de parto menos invasivo y con la menor intervención posible, donde el doctor más que activo está expectante.
Dentro de los tipos de parto en el parto natural el feto nace a través de los genitales femeninos. En esta alternativa de parto, existe mediación médica para una correcta supervisión, evitando cualquier complicación y posible dolor de la madre o del recién nacido. Puede ser con o sin administración de anestesia, la paciente toma la decisión.
Otro factor importante de un parto menos intervenido, es el apoyo y participación del padre, lo que contribuye al éxito del nacimiento espontáneo y el bienestar materno-fetal. En el parto natural la contención de quien acompaña a la madre es clave.
Dentro de los tipos de parto este método, gradualmente enseña a la madre a mantener bajo control el dolor producido por el trabajo de parto. Para ello es necesaria la preparación desde el primer control. En estas visitas al ginecólogo, él educará a la embarazada para que adquiera hábitos saludables, que tenga una correcta alimentación, controle su peso, realice actividad física y controles con ambos padres con una matrona, para así dar término el proceso de gestación con máxima seguridad.
Cada mujer controla de diferente manera el dolor. Algunas actividades que se recomiendan son:
La madre puede recibir a su hijo en posición ginecológica o agachada para que ocurra el parto de forma vertical, depende de su comodidad.
Pero durante el parto pueden aparecer situaciones que requerirán de una analgesia apropiada, y la ayuda de un anestesista será clave en la solución de eventuales problemas en este tipo de parto.
Dentro de los tipos de parto en el parto vaginal, todos los esfuerzos son para que el feto tenga una salida expedita por la vagina. Anatómicamente el cuerpo femenino cambia de manera progresiva para que esto suceda, pero todo depende de la etapa de parto vaginal que se encuentre la futura madre, las contracciones que presente, la posición y tamaño del feto.
Si la madre presenta señales de parto como contracciones, dolor de espalda, calambres abdominales o pérdida de líquido o sangrado, quiere decir que la guagua está por nacer.
Tres fases de trabajo de parto vivencia la mujer.
En esta etapa el cuello uterino cambia de posición, de consistencia y se dilata, gracias a las contracciones del músculo. Las que habitualmente suceden cada 20 minutos y no provocan dolor. Es por esto, que se elimina un tapón mucoso, lo que indica que pronto comenzará el trabajo de parto.
Si durante una hora, las contracciones tienen una frecuencia de 5 minutos, indica que el cuello del útero se está modificando, y el especialista debe hacer un tacto vaginal para lograr saber si el útero provocó los cambios cervicales hasta borrar el cuello uterino. Porque al finalizar este proceso, comienza la fase de dilatación.
Las contracciones cada vez son más continuas e intensas, y cuando el cuello logra su punto de dilatación de 10 cm, comienza el trabajo de parto y la cabeza fetal puede pasar y descender por el canal de parto. Este proceso dura aproximadamente entre 6 y 12 horas.
La dilatación continúa y, con ello, las contracciones se pueden tornar dolorosas. En esta etapa es donde el equipo médico evalúa la presencia de anestesia, lo que depende del momento del trabajo de parto que se encuentre la madre.
Posterior a esto, de forma espontánea o por la acción de la matrona o médico, ocurre la rotura de membranas ovulares o bolsa de agua, para realizar el tacto vaginal. Esto ayuda a que la cabeza de la guagua se apoye en el cuello uterino, facilitando su dilatación.
Cada dos a tres minutos la madre siente contracciones, y a medida que suceden, ella debe aprovechar de pujar, para luego descansar y retomar fuerzas para la próxima que se avecina.
Gracias a este esfuerzo, es que la cabeza del feto logra llegar al canal vaginal y desciende por completo por la serie de movimientos involuntarios que realiza.
Cuando el cuello del útero se dilata totalmente, es que el feto logra salir por completo, puede que el descenso se demore hasta 120 minutos. Una vez que sale la cabeza, la madre debe descansar y dejar de pujar para así comenzar la etapa final del proceso del parto.
Posterior a la expulsión de la placenta y de los anexos ovulares, lo que dura en promedio 10 minutos.
Luego que la guagua logra salir, el útero continúa contrayéndose hasta que se desprende la placenta, tras lo cual ésta cae y desciende por el canal vaginal. A medida que esto sucede, el equipo médico se encuentra revisando al recién nacido, para informar a la madre de su estado y presentarlo para que se establezca el apego entre padres e hijo. Luego, la guagua es trasladada a la unidad donde será controlado.
Cuando termina de salir la placenta y las membranas ovulares, el equipo médico procederá a la revisión de la cavidad uterina. Confirmando que esté libre de tejido placentario, para permitir una mejor retracción y reducir el sangramiento postparto.
Finalmente, el médico procederá a realizar una revisión del canal vaginal y del cuello del útero para verificar su estado luego del parto.
El tipo de parto por cesárea consiste en una cirugía abdominal que se realiza para extraer al feto cuando el parto vaginal representa algún riesgo para la madre o para la guagua, o cuando definitivamente no es posible que nazca por esa vía. En algunas oportunidades se debe practicar pese a que ya se está en trabajo de parto vaginal.
Para que tengan una idea, entre el 30 y el 50% de los partos que ocurren en el país son por cesárea.
Las causas más frecuentes por las que se practica esta cirugía, son las alteraciones de la presentación fetal al término del embarazo (que el feto no esté en posición cefálica o de cabeza), aquellos casos donde el peso del feto supera los 4.200 gramos, placenta previa, embarazos múltiples o que la madre haya tenido dos o más cesáreas previas. Otra de las razones por qué se realiza este tipo de parto es porque la dilatación no avanza adecuadamente o los latidos de la guagua no toleran bien el trabajo de parto.
Algunos tips para prepararte para una cesárea:
Algo que se recomienda y no falla, es llevar la ropa en bolsas transparentes separadas por tipo, por ejemplo: Bolsa 1 ropa interior.
Si te indicaron una cesárea para dar a luz, en esta cirugía, el médico anestesista adormecerá parte de tu cuerpo para que relajes la musculatura abdominal e impedir que sientas dolor. Luego tu gineco-obstetra realizará una incisión en la parte baja del abdomen para extraer a tu bebé.
En general, la mujer que tiene una cesárea debe permanecer unos días más hospitalizada en comparación con otros tipos de parto. Tras el alta, vuelve a su casa pero debe seguir algunas recomendaciones generales.
Ahora, independiente del tipo de parto que tengas, actualmente se estila mucho solicitar un parto respetado.
¿De qué se trata?
De esta definición se derivan las siguientes acciones del equipo médico que son un derecho para la madre que ingresa a su trabajo de parto:
Te recomendamos conversar con el equipo médico que está apoyando tu gestación sobre estos puntos antes del momento del nacimiento, de manera que puedas despejar tus dudas y pedir aquello que es básico para tu proceso de parto.
Sabemos que hay equipos médicos a lo largo del país implementando y dando opciones cada vez más respetuosas, sin embargo esto aún depende directamente del equipo médico que te atienda más que del Hospital en sí mismo.
Esperamos que este artículo sobre los tipos de parto te haya gustado y resultado útil, de ser así ¡agradeceríamos un montón que lo compartas!, para que también otras mamás puedan estar informadas. 🙂
Francisca Bartolomé
Fuente:
Clínica Las Condes
www.elmostrador.cl